Sacando el hilo tenue de la seda
con dedos presurosos de ternura
abro en tus bastidores mi costura
desfilando a puntadas tu vereda.
Se enhebran los trigales y se enreda
la aguja de mi sed y mi amargura
en tapices y telas de alma oscura
cuando paso el hilván con calma queda.
Se desnuda la luna de su enagua
y la deja caer sobre tu frente,
sobrehilada en amor desde mi fragua.
La vainica de un sueño en mí silente
acordona tu tez con hilos de agua
y hace arder tu telar, de luz, caliente.
con dedos presurosos de ternura
abro en tus bastidores mi costura
desfilando a puntadas tu vereda.
Se enhebran los trigales y se enreda
la aguja de mi sed y mi amargura
en tapices y telas de alma oscura
cuando paso el hilván con calma queda.
Se desnuda la luna de su enagua
y la deja caer sobre tu frente,
sobrehilada en amor desde mi fragua.
La vainica de un sueño en mí silente
acordona tu tez con hilos de agua
y hace arder tu telar, de luz, caliente.