Para todos los que escriben
"...cantamos porque llueve sobre el surco
y somos militantes de la vida
y porque no podemos ni queremos
dejar que la canción se haga ceniza."
Mario Benedetti
Y revive...
todo lo que antes fue de cera
en la estrechez del callejón
que escupe tinta en el susurro.
Mutilado el hueso,
aún se alimenta de sangre
sin necesidad de reinventarse en lo mediocre.
La niña escribió en su diario una verdad
para que todo el fuego que arde en el planeta
se apagara de una vez por todas.
Atravesaremos las calles con las suelas limpias
y seremos como neveros solitarios
conservando el aroma invisible de un invierno,
pero no cerraremos la carne a los cuchillos
cuando la palabra se estremezca por el odio,
cuando la muerte sea equívoco en la guerra
y se deshagan las llaves del edén.
Escribir es acto que entrega y abandona la mente
sobre el impecable mutismo del papel,
antes,
madera,
antes,
árbol,
antes,
luz sobre la hoja.
Laura Gómez Recas
Poema para el III Encuentro de Poesía en la Red
Estoy sorprendida. El poema se había escrito con el texto en el margen izquierdo. Así lo imprimí y así se leyó en Alcalá.
ResponderEliminarAl publicarlo en el blog, he utilizado, como siempre, la alineación centrada en el editor de textos.
Inexplicable casualidad? Es un caligrama casi perfecto.
De hecho la última parte del poema no está dispuesta así originalmente, sino en forma de escalera. Pero era algo que no me dejaba hacer el editor de Blogger y decidí pornerlas en cascada vertical.
(lamento la pesada aclaración, pero, a veces pasa, los poemas se escriben solos, por sí mismos)
Laura
¡Qué belleza!
ResponderEliminarEn tu voz sonaba y se hacía inmensa.
Un beso.
Hoy rompo mi silencio, Laura, para decirte que el poema es precioso y escucharlo de tu preciosa voz fue una maravilla, si ahora la añades esta aclaración (nada pesada) sigue creciendo.
ResponderEliminarUn beso.
Bravo, bravo,
ResponderEliminarbravo...Te adoro, pero eso ya lo sabes...
Inmortal siempre Benedetti. Tu poema, Laura, es simplemente espectacular.. tiene mucha fuerza.
ResponderEliminarNoray, gracias. Siempre ves belleza en lo que escribo.
ResponderEliminarMe debes una charla. ¿Qué pasó que te volatilizaste? Perverso destino.
Un beso enorme.
Laura
Paloma, gracias por romper el silencio. Esta tarde quise comentar en tu blog, pero no pude. Me alegra mucho que te guste ahora, leído. Creo que los poemas son más para ser leídos que para ser escuchados.
ResponderEliminarUn beso.
Laura
Sí, Marisa, lo sé. Y me gusta. Mucho.
ResponderEliminarBeso entero, eres un sol.
Laura
Gracias, Marcos. De éste me siento algo satisfecha. Y eso ya es rarito en mí. Le siento según quería sentirle.
ResponderEliminarVer eso de "espectacular" cerca del nombre de Benedetti da algo de vértigo. :o)
Un beso y mil gracias por acudir, siempre.
Laura
El papel fue antes árbol, madera y luz.
ResponderEliminarLa tinta con que lo llenaste fue antes cuerpo y vida de poeta.
Los ojos con que hoy lo leo fueron antes oído acariciado por tu voz.
Besos, Laura.
...Vuelvo a lo dicho en otras ocasiones ('pesao' que es uno..), a veces la poesía tiene vida propia :), no solo para buscar a quienes la necesitan en el momento preciso, sino también para organizar su aspecto a su antojo :).
ResponderEliminarMe gusta el fondo, y me gusta la forma...'sentir' la renovación precisamente ahora que llega el otoño (y quizá por eso mismo), se transforma en un recordatorio necesario.
como siempre... gracias.
Muy buen poema, Laura. Me quedo con el final, ese recorrido circular desde la madera al árbol y acabar en la luz de la hoja, lo no escrito pero ya sentido.
ResponderEliminarMe encantó.
Un abrazo fuerte.
"pero no cerraremos la carne a los cuchillos..."
ResponderEliminarAh y ese: "antes luz sobre la hoja" referido al papel en donde escribimos. ¡precioso!
Yo, si me dejas, añadiré en un poema futuro (con cita): "y luego luz inversa en mi escritura"
El poema como su creadora, de belleza suprema.
ResponderEliminarBesitos, guapa.
PD. Te he contestado por los abajos sobre este cambio de color tan, tan, tan...
Es un placer el ver
ResponderEliminaren letra impresa
el poema,
poder evocar
la voz y la belleza.
Un gran abrazo
Ybris, qué belleza de comentario. Siempre me dejas clavada. Gracias por hacerme llegar que te llegó mi lectura.
ResponderEliminarEl poema lo escribí el jueves pasado. Pensaba en el encuentro, en esto de escribir y me salió esto en forma de cículo. El papel con origen de luz que se transforma en receptor de la luz del poeta.
Te mando un besazo. Me encantó verte, me encantó.
Laura
Gracias, Ave.
ResponderEliminarDe 'pesao' nada de nada. Es un honor que me leas y te pares a hablarme.
Lo mejor: que llegue en el momento preciso a quien lee. Por eso engancha, porque la poesía la hacemos nuestra cuando notamos que habla de lo que sentimos.
Un beso, merecido.
Laura
Gracias, José Antonio.
ResponderEliminarCuando me comentas un poema, pienso... ¿éste le gustó? Me encanta que me los destripes. Buena lectura.
Un beso.
Laura
¡Claro, Gonzalo! Mi idea es tu idea. Somos parte de lo mismo.
ResponderEliminarEstuviste genial el martes en el recital Orillas de Ávila. Lleno absoluto: estuve todo el rato de pie y abanicándome y, aún así, fue un placer escucharos.
Besos.
Laura
Gracias, Jesús. Por el piropo al poema y a la autora.
ResponderEliminar:o)
Ya ves que te hice caso. Y, como te insinué, he dedicado una entrada al cambio de color en el texto. Todo sea por ese postre apetitoso y por tus ojillos cansados.
Un besazo.
Laura
Marias, gracias. Leerlo es mejor que escucharlo. Siempre. Pero la evocación contiene un sentimiento.
ResponderEliminarUn beso grande, poeta.
Laura
Me gustó y lo aplaudí al escucharlo de tus labios, ahora me recreo en su lectura.
ResponderEliminarUn beso, Laura.
¡Qué bien, Terly! Tenerte por aquí. Gracias, de verdad.
ResponderEliminarUn beso.
Laura
me entran ganas de escribir sin parar sin límites
ResponderEliminarhasta el final
un beso compañero...me encanta
¡Vaya, Roberto! Esto sí que es genial. Me encanta eso de que te incite a escribir.
ResponderEliminarOtro beso compañero,
Laura